Voy a suponer que no quieres saber nada de mí, simplemente
porque así es como tu pecho se siente a gusto… sin mí.
Voy a suponerlo para poder sacar de mí todo tu espacio
absurdo ocupado desde hace tiempo simplemente con la esperanza de algún día
triunfar; pero volvamos a ser realistas, tú te alejas y yo, sencillamente me he
cansado de seguirte las huellas.
Voy a suponer que tu ausencia no duele, que tu forma de
ignorar es simplemente la forma más eficaz de borrar promesas que hiciste
estando muy feliz, o quizá muy esperanzado como para cumplir en un mundo
carente de ilusión, inmune al querer que aunque difícil se alimenta de sonrisas
robadas en días cualquieras.
Voy a suponer esta noche que ya no me importa tu vida, que
no estás en mis sabanas rodeado de canciones que me hacían soñar con vidas
imposibles, con tiempos perfectos escondidos en situaciones comunes que todo el
mundo ignora, que todo el mundo omite pero que para los dos eran siempre
presentes.
Lo cierto, es que ahora siento que ya no hay fe en ti, no
hay fe en nosotros como aquellas vez cuando decidimos escondernos por siglos e
incluso vidas…siento un miedo inútil que a lo mejor se apacigüe pero jamás desaparecerá
porque tu interés va en retroceso, y mi paciencia ya no encuentra donde
prenderse, asi, que resbala lenta por el desfiladero de tus mejillas sin remedio alguno.
Es tarde, y aunque lo había dicho antes en muchas otras
cartas, creo que ahora si es correcto usar el tiempo para decirte que en efecto…
es tarde; tarde para tener conversaciones que aplazaste, tarde para confesiones
que no importan. Es tarde y aunque la lluvia ahora sea mas fuerte que aquella
noche, no es suficiente para llevarse tu corazón de mi ser, no es suficiente
para opacar este querer que odio pero que se alimenta de tus innumerables decepciones.
Voy a suponer que mis sentimientos son solamente un eco de
soledad, porque en realidad mi voz está cansada de ofrecerte metáforas que no entiendes,
mis ojos están vacios de tu soledad, y mi vida… mi vida ya no puede seguir
solamente pretendiendo sobrevivir a ti.
Erika Zúñiga Lee
Puedes copiar todo lo que quieras, pero si no me das los créditos
el día que mueras robare tu alma
No hay comentarios:
Publicar un comentario